viernes, 31 de julio de 2009

El Guerrero visto por...Horacio Díez


El Guerrero del Antifaz visto por Horacio Díez


La presente ilustración ha sido publicada hoy mismo por el ilustrador Horacio Díez en uno de sus blogs, aunque también hay que decir que ha tenido la gentileza de enviármela por correo electrónico.
Aprovecho la ocasión para recomendar la visita a un blog imprescindible; Cómics historietas, tebeos... donde podemos encontrar detallados, documentados y fenomenales estudios sobre los grandes del cómic. He de confesar que en más de una ocasión he pasado a papel impreso tales trabajos con la intención de guardarlos como documentación en una carpeta por lo volátil que es internet.

He aquí su lista de blogs (basta pinchar en cada uno de los dibujos para acceder a ellos):





jueves, 30 de julio de 2009

El Guerrero del Antifaz reeditado (2). Mi opinión.

La editorial Valenciana, siguiendo el ejemplo (el mal ejemplo) en aquella época de Bruguera y Burulan, que estaban teniendo éxito con sus respectivas reediciones, se planteó lanzar al mercado su serie estrella adaptándola a la moda y a los condicionantes de aquella época. Recordamos que la censura a principios de los setenta era paradójicamente mucho más férrea que en los años cuarenta, por lo que desgraciadamente la editorial tuvo que efectuar los cambios oportunos en la serie. No es que quiera justificar a la Editorial Valenciana, es que, por lo menos esta decisión de autocensurarse, vino impuesta desde más arriba. A la edición a color de El Guerrero del Antifaz cabe achacarle numerosos defectos; remontaje de viñetas, supresión de otras tantas, adulteración de los textos, censura de las imágenes, etc.


Por otro lado, la Editorial Valenciana, imitando a Burulan, ofrecía unas llamativas tapas para encuadernar los cuadernos, pero la misma editorial y muchos aficionados cometían el error de encuadernarlos sin las portadas, por lo que se perdían unas bonitas ilustraciones que suponían lo mejor aportado por esta reedición (no estoy de acuerdo en absoluto con Antonio Lara quien reniega de estas portadas).

Aunque lo cierto es que cuando éramos niños estábamos totalmente ajenos a estas circunstancias. Ni conocíamos la versión original ni nos planteábamos nada de lo anteriormente expuesto. Lo que nos enganchó a la colección fue la trama creada por Gago. Disfrutábamos de la historia que continuaba semana tras semana con gran interés siguiendo las andanzas del Conde de Roca en su caballeresca singladura.


A pesar de todos los defectos antes mencionados, cabe agradecer la presencia de esta colección en los kioscos durante los años setenta, pues dio oportunidad a una nueva generación de lectores de aficionarse a la lectura de los tebeos. También es cierto que debido al éxito de esta edición, fue posible la vuelta de Manuel Gago al tablero para continuar las Nuevas Aventuras del Guerrero del Antifaz que llegaron al número 110 con un final inacabado debido a la muerte del autor.


Pero eso ya es otra historia...

martes, 28 de julio de 2009

El Guerrero del Antifaz reeditado. Entrevistas a Manuel Puerto y a Manuel Gago.



BANG. Boletín informativo 32-33.
Mayo-Junio de 1972

Con motivo de la publicación en el blog de Comics Compartidos de los primeros ejemplares de la reedición a color de El Guerrero del Antifaz de 1972, hemos creído oportuno exponer aquí un estudio sobre tal reedición, publicado por el fanzine BANG nº 32-33 con fecha de Mayo-Junio de 1972, o sea, con la colección recien comenzada a publicarse.

El dossier consta de un artículo de presentación con la opinión de José Pérez Casado acerca de la reedición, una entrevista a Manuel Puerto, dueño de la Editorial Valenciana y otra a Manuel Gago, en la que ambos nos presentan las expectativas que tiene cada uno sobre esta reedición además de otros datos de sumo interés.

El estudio finaliza con la autorizada pluma de Antonio Lara, que expone una vez más, su opinión sobre el conjunto de la obra reivindicando sus valores , aunque tampoco considera positiva esta reedición remontada y censurada.

Por último decir que acerca de esta reedición a color de El Guerrero del Antifaz existe un completísimo estudio con numerosos ejemplos y datos en la página web de Mariano Bayona, cuya visita recomiendo para ampliar contenidos si se está interesado en este tema.




El Guerrero del Antifaz a color.


El Guerrero del Antifaz reeditado.
El día 5 de Junio de 1972 se ha puesto a la venta el nº1 de la reedición de El Guerrero del Antifaz. Con cuatro números en la calle redactamos unas páginas de aproximación primera. El tebeo se presenta en cuadernos verticales de 16 páginas a todo color más cuatro de cubierta. Tamaño 26 x 18,5 cms. Portadas dibujadas expresamente por Manuel Gago. Precio. 12 pts. Categoría “publicación juvenil”. Se complementa, en la retiración de cubiertas, con historietas de humor. Publica. Editora Valenciana S.A.,(por amabilidad de la cual nuestros suscriptores reciben el nº1 como obsequio).

Reflexión provisional ante la reedición.- La alteración de contenidos. Eliminación de viñetas, alteración de textos (reconocible en los primeros cuadernos por la distinta rotulación), modificación del dibujo en algunas viñetas, etc., que mutilan gravemente el ambiente que Gago creara en 1944 para su héroe, obligan a preguntarse por la validez de una reedición que deja de ser tal, por estos cambios, para aparecer, simplemente, con una nueva edición de un material viejo.

El producto actual se presenta, pues, como híbrido a través de los condicionantes de la edición, y obliga a plantearse una pregunta a la hora de la recensión: ¿cómo juzgar esta edición, con el criterio benevolente del recuerdo ante el tebeo de un tebeo procedente de nuestra infancia o más bien con el criterio exigente que nos impone el alto nivel que hoy ha alcanzado la historieta española? La posible respuesta se corresponde con la pregunta: ¿a quién se dirigen las reediciones comerciales de material antiguo; al público nostálgico o al público joven actual?

Habla Editorial Valenciana.
La inmediata novedad que supone la reaparición del Guerrero del Antifaz nos lleva a cubrir la información directamente, recogiendo las palabras del editor y del autor de este personaje. ¿Qué intenciones, qué propósitos animan hoy a Editorial Valenciana?¿Por qué vuelve a editar los cuadernos del guerrero?¿Qué piensa Manuel Gago respecto a esta edición? Son preguntas cuyas respuestas nos interesan e imaginamos interesan también a los lectores.

Hablamos ahora con don Manuel Puerto, gerente de la editorial.

José Pérez Casado.- ¿Podría usted decirme el por qué de esta reaparición?
Manuel Puerto.- El por qué es quizás un poco nostálgico, puesto que es uno de los primeros personajes de cómics y en su época obtuvo un éxito importante, llegando la publicación a alcanzar las más altas tiradas, pues se legaron a imprimir en los buenos tiempos de este personaje hasta 130.000 ejemplares. Tenga en cuenta que le hablo de 1944/45, puesto que la aparición de esta revista en el mercado fue el 24 de Octubre de 1944.
P.C.- ¿En qué público piensan ustedes, con qué publico esperan contar a la hora de esta reaparición?
M.P.- En realidad, esta colección estaba dirigida a lo que actualmente llamamos público juvenil. Ahora se ha buscado reeditar la colección modificándola lo menos posible, dándole pues, el carácter que tenia en principio, pero cambiando cosas, poniéndolas al día como es por ejemplo la rotulación, el cierre de viñetas, fondos de manchas negras, eliminando cosas no por desvirtuar la colección, sino por mejorarla. El público que nosotros buscamos es el público que ya conoce al Guerrero porque en su juventud lo leyó y actualmente este mismo público nos pide este personaje porque le gustaría volver a leerlo. Hay muchas personas que han coleccionado los títulos del Guerrero y ahora les faltan número que es imposible encontrar. Es a estos señores también y, sobre todo, al público actual que desconoce por completo lo que era este personaje, a quienes nos dirigimos.
P.C.- O sea que ustedes buscan un mercado ambivalente el nostálgico y el actual. Bien, ¿podría comentarnos la presentación, el por qué del color?
M.P.- El color porque actualmente las revistas, por exigencias del mercado, han de estar bien presentadas, sobre todo en un buen papel blanco, a color y con un formato interesante, lo que nos ha hecho cambiar el que originariamente tenía el Guerrero, apaisado, por el vertical. El cuaderno actual lleva 16 páginas interiores con cubiertas de couché a todo color.
P.C.- ¿Y las portadas?¿No sería posible respetar las viejas portadas, con todo su sabor?
M.P.- No, las portadas antiguas no se pueden respetar porque no dan la proporción y sería muy difícil el acoplarlas al nuevo formato. Entonces, con el mismo tema incluso, Manuel Gago nos está dibujando nuevas portadas. Respecto al contenido, al ser mayor la capacidad de estas 16 páginas verticales, daremos en cada cuaderno actual 2 ó 3 de los antiguos.
P.C.- ¿Cree usted que el público responderá al esfuerzo editorial que realiza la Editora Valenciana con el nuevo lanzamiento de las aventuras del Guerrero del Antifaz?
M.P. – Sí, francamente creo que responderá todo el público que ya conoció, en su época, a este personaje y que también será un éxito entre el público más joven pues se trata de un personaje que no está desfasado en la actualidad, máxime estando ahora en candelero la resurrección de viejas glorias y teniendo en cuenta que este personaje ha sido calificado por personas entendidas como uno de los pioneros del cómic español, incluso europeo. Además el tema es bueno, el argumento es bueno, se ha procurado mejorar la edición...
P.C. - ¿También mejorar estéticamente?
M.P.- Sí, en todos los aspectos, incluso estéticamente se han reformado dibujos, se han ampliado, siempre sin variar el antiguo original, pero procurando de todas formas mejorarlo, en una palabra actualizándolo.
P.C. – Aparte del Guerrero del Antifaz ¿preveen la posibilidad de editar de nuevo algún otro personaje de su archivo?
M.P. – A plazo corto no, pero tenemos en estudio un personaje que aún se publica, Roberto Alcázar, ya que la primera aventura de este personaje tiene ya una vida de más de treinta años y, lógicamente, toda la época primera es desconocida para el público actual.




Habla Manuel Gago.

Conocido el planteamiento editorial respecto al viejo-nuevo Guerrero del Antifaz nada mejor que completar la información hablando con Manuel Gago, el hombre que creó este personaje, uno de los más populares de la historieta española de los años cuarenta y cincuenta. Nos trasladamos a su estudio y obtenemos de amabilidad respuesta a nuestras preguntas.

José Pérez Casado.- ¿Cree usted, señor Gago, que es momento adecuado para la reedición del Guerrero del Antifaz?
Manuel Gago.- Pues a mi parecer no es el momento oportuno y creo, francamente, que no tendrá gran resultado.
P.C. - ¿Por qué cree esto?
M.G.- Porque estos son otros tiempos y probablemente no los más adecuados para hacer publicaciones de ese tipo. Todas las publicaciones han experimentado un descenso en la aceptación del público, la venta es muy reducida y, francamente, se atraviesa por un momento de crisis en las publicaciones infantiles.
P.C.- Bien, hagamos un alto respecto a la actual edición, para hablar de usted y de su obra, lo que interesará grandemente a los lectores. ¿Cómo nació la idea de crear al Guerrero del Antifaz?
M.G.- Se me ocurrió que podía ser un personaje interesante, me gustaban las historias que se publicaban entonces del Hombre Enmascarado y Flash Gordon y me animé a hacer algo, con un héroe español y que fuera histórico.
P.C.- Usted dirigía el personaje al público infantil...
MG.- Sí, indudablemente era el público infantil y juvenil, aunque puede decirse que era una publicación para todos los públicos, pues gustaba también a los mayores.
P.C. - ¿Cómo trabajaba usted?
M.G.- Yo dibujaba y al mismo tiempo creaba el argumento y el guión, o sea primero hacía un extracto del guión y luego lo desarrollaba al mismo tiempo que lo iba dibujando.
P.C.- ¿Seguía usted este sistema con sus restantes personajes?
M.G.- Pues sí, concretamente el Pequeño Luchador era un argumento mío., y yo hacía los guiones, e igual con muchos personajes. Otros no, tenga en cuenta que yo he dibujado mucho, al día 12,13,14 horas, en fin sin parar, pues hacía 4 ó 5 cuadernillos ya a veces más por semana, trabajando para la Valenciana y para Maga.
P.C.- ¿Cómo nació su ilusión, su pasión por el dibujo?
M.G.- Me gustaba dibujar desde que era un chico y muchas veces abandonaba los estudios con tal de hacer monigotes. Estudios de dibujo , en serio, no he realizado ninguno, no he ido a ninguna academia de dibujo ni nada de eso. Claro que entonces tampoco teníamos las posibilidades que ahora tienen los jóvenes.
P.C.- ¿Cuándo dejó usted de dibujar, al desaparecer el Guerrero del Antifaz?
M.G.- Hace ya seis años, pero aún hice alguna cosa después de desaparecer el Guerrero del Antifaz, pero las publicaciones iban cayendo en general y, en fin, consideré que no era el momento, no era bueno continuar con eso, busqué otra cosa y casualmente la encontramos. Incluso me ha venido bien el hacer un alto en el camino en todo esto, aunque me gusta mucho el dibujo y pienso incluso continuar, desde luego más adelante.
P.C.- ¿Por qué cree usted que fueron decayendo los cuadernos de aventuras?
M.G.- En ello han influido varios factores, la televisión principalmente, incluso más de lo que pueda haber intervenido la censura con su criterio riguroso.
P.C.- Hablemos de censura,¿ qué era lo que ocasionaba mayores problemas de censura?
M.G.- Es difícil recordar al cabo del tiempo, pero sucedía a veces que yo tenía que rectificar muchos dibujos e incluso hubo que corregir guiones.
P.C.- Insistiendo sobre el tema, ¿qué era lo que ocasionaba mayores problemas, las violencia, las escenas de cama con señoras moras por medio..?
M.G.- No, no, de camas nada, no había escenas de tipo escabroso, ninguna, o sea, sólo se hablaba de matrimonio y todo eso, bueno, claro que había harenes y muchas mujeres... De todas maneras, cualquier relación con asuntos amorosos aunque fueran...
P.C.-... muy dignos.
M.G.- Sí, exacto, pues no eran bien vistos. Y, desde luego, la violencia, aquí sí que había problemas. Muchas veces ha habido que rectificar incluso figurando una escena, una batalla campal, pues los personajes han tenido que salir sin armas de ninguna clase, simplemente como muñecos sin vida.
P.C.- Volvamos al momento actual, la reedición del Guerrero del Antifaz está en marcha, la editorial lanza nuevamente el personaje, pero y usted, como autor ¿va a cobrar derechos por esta nueva salida?
M.G.- Hemos estipulado desde luego una cantidad, no muy alta, pero en fin, en total por la publicación completa del Guerrero unas 100.000 pesetas.
P.C.- Ello irá al margen de las portadas que realiza, imagino.
M.G.- Sí, claro. Pero estas portadas yo las hago por recordar, por practicar un poquito el dibujo, no buscando el aspecto económico. Siempre recordaré el personaje con agrado, hay que pensar que prácticamente es lo primero que hice y desde luego lo mejor. Yo no esperaba que pudiera tener tanto éxito, tenía mucha ilusión con ello y trabajaba muy a gusto.
P.C.- Bien, muchas gracias por su amabilidad y si podemos añadir algo más...
M.G. – Nada más, saludar a todos los lectores de Bang!, y algún día volveré a dibujar alguna historia de estas, pero más adelante, han de pasar unos años, de momento pienso dedicarme a otras actividades y aunque continuaré dibujando será en plan secundario.

José Pérez Casado.



El regreso del Guerrero del Antifaz .
Antonio Lara

Manuel Gago ha vuelto a ocuparse de su más famoso personaje; el Guerrero del Antifaz, en las nuevas portadas de la reedición de las primeras aventuras (1). Como era de esperar, no se trata de una edición cuidada, sino de una presentación a tono con las líneas generales de este país en vías de desarrollo, es decir, con flamante e inútil color, cambio de formato, alteración –confesada- de los textos, etc.,etc. Nada nuevo en realidad; los principales y más abundantes pecados editoriales imaginables reunidos todos en una misma publicación. Sería muy curioso saber que piensa la juventud actual de esta interminable serie de correrías saudocaballerescas y también poder medir la ola nostálgica y soñadora que, sin duda, hará nacer en miles y miles de calvos, barrigudos y pluriempleados padres de familia celtibéricos, a los que volverá a traer ecos de su perdida niñez y adolescencia.

En anteriores estudios míos sobre el Guerrero (2), he intentado analizar el alcance de este representativo personaje, sus relaciones con el contexto cultural de la época así como el estilo del dibujante y los principales puntos de interés del guión. Su reciente y completa reedición en el fenecido diario Madrid, aún con el inconveniente grave de la fragmentación artificial e tiras y el horrendo subtítulo de “comic camp” que le pusieron, permitió también una aproximación reciente a este emblemático y significativo producto, perfecta respuesta a la época en que nació.

He escrito –y sigo manteniéndolo- que la interminable saga del Guerrero, especialmente en sus cincuenta primeros cuadernos, hasta 1949, aproximadamente, es una obra muy interesante y aprovechable, aunque no pueda llamársele, desde luego, obra maestra. Podría, incluso, sin la menor exageración, decirse que representa uno de los logros más completos y homogéneos del tebeo español de la posguerra, y la agilidad de los dibujos, la concisión y vivacidad de los diálogos, junto a la riqueza y unidad de las situaciones dramáticas, le convierte en un modelo de obra popular.

Por eso resulta todavía más doloroso el contrate entre las viñetas antiguas de Gago, repletas de sabor y gracia, frente a estas penosas portadas contemporáneas, triste repetición torpe de fórmulas gráficas totalmente depreciadas.

El artista valenciano, aunque cayó muy pronto en la cadena inexorable del trabajo en serie, en el que cualquier mimo y cuidado ha de ser proscrito, tuvo una época buena, entre 1944 y 1949, más o menos, en la que llegó, muy pronto, a un estilo personal, muy apto para ilustrar aquellas aventuras de ambiente medieval, asimilando bien las lecciones de maestros como Alex Raymond y Emilio Freixas. Quizás fue Gago uno de los que mejor supieron adaptarse a las inexorables exigencias de la producción industrial sin perder su estilo propio, aunque al comienzo de los cincuenta se metiera totalmente en el engranaje, derivando inevitablemente hacia un modo de hacer descuidado, simplón, sin el menor relieve ni calidad, carente de toda preocupación que no fuera el terminar pronto.

Ahora, a bastantes años de distancia de aquella época, Gago vuelve a dibujar estas composiciones tímidas, torpes, balbuceantes y anacrónicas, donde ni el más benevolente observador puede encontrar nada bueno. ¿No hubiera sido mejor dejar al infatigable guerrero castellano en la paz de los héroes olvidados, y a su autor en el recuerdo de los buenos aficionados?
(1). Recomiendo, vivamente, la lectura del anónimo texto que prologa la nueva edición, lleno de involuntario humorismo: “ La colección, por su carácter, por nuestra, caló profundamente en sus lectores (...) Los nombres de sus personajes corrían de boca en boca en los hogares, academias, institutos, universidades y lugares de reunión”. Lo mejor, con todo, de esta impagable presentación es la seguridad que se intenta imprimir en el hipotético lector de que los cambios y alteraciones son, no sólo buenos, sino necesarios.
(2). Vid. Mi tesis de fin de carrera en la escuela de periodismo de la Iglesia, y, también, el estudio publicado en Bang nº1.

Antonio Lara

lunes, 27 de julio de 2009

EL ESPÍRITU DE LA SELVA DE LÓPEZ BLANCO



El Espíritu de la Selva
1962 Editorial Maga
90 ejemplares
Dibujo López Blanco


Memoria sentimental en blanco y negro

"Seducir - dice Jean Baudrillard, - es abolir la realidad y sustituirla por la ilusión en el juego de las apariencias". Esta frase tiene relación con el culto a los tebeos nacidos en nuestra posguerra, en la que los más celebrados personajes que vieron la luz no solamente son recordados sino que se siguen reeditando.

Ha pasado casi sesenta años y estos héroes del bien y la justicia no decaen en el imaginario y mito popular y siguen ejerciendo de manera inalterable su juego de seducción en los que fuimos niños en esos años.
La historieta forma parte de nuestra historia cotidiana que buscó hacernos reír y soñar con nuestros personajes favoritos. No había nada más emocionante, cuando éramos niños era parar en el kiosco a visualizar las novedades hasta que te los podías comprar

Son muchísimos los creadores de cientos de personajes que hicieron soñar durante años a varias generaciones de Españolitos. Cuando nos paramos a pensar en los personajes que perdimos y que hoy son historia, nos entran ganas de volver a ser niños, sin que nos importe lo que dirán, y volver a leer aquellos cuadernillos. Volver a reírte y disfrutar como antaño, recuperar la ilusión. La ilusión que crearan aquellos personajes ficticios pero que en definitiva formaron parte de nuestra realidad.

Los territorios de la fantasía
En los tebeos se proyectaban nuestros anhelos de fantasía y de aventura en territorios lejanos, misteriosos y poblados de prodigios: islas del tesoro, Selvas inexpugnables, desiertos y los inalcanzables plantas de la ciencia-ficción, el rasgo común de la lejanía y la inaccesibilidad, cual viaje iniciático.

La historieta es una presencia prominente en la España franquista. Fuente de mitos. La historieta fue una fuerza financiera de enorme envergadura cuyo influjo abarcó todas las áreas del paisaje cultural español.

Cuantos leímos aquellos tebeos, participamos de un mismo universo referencial, unas experiencias vitales, unos hábitos de percepción e interpretación comunes que incluyen múltiples formas de ver, de escribir, de leer y de pensar.

Había tebeos para todas las edades y para muchas sensibilidades. Los había para entretener. Había diferentes tipos de tebeos; para los amantes de los seriales interminables y para degustadores del relato corto.

La historieta se consolidó como tal, en nuestro país, allá por el año 1944. Lo que está fuera de duda es que su desarrollo vital y máximo esplendor tuvo lugar en la década de los cincuenta; los personajes y series que ya forman parte de la mitología popular y los autores que alcanzarían inusitadas cotas artísticas existieron en un período que bien puede ser calificado como “edad dorada”.

Dicho periodo significó la aparición de las más importantes series del género humorístico, aventurero, policíaco, western y ciencia-ficción, a la vez que contemplo el desarrollo y cenit creativo de los más fructíferos artistas de la narrativa dibujada.

Son diversos los títulos que merecen conocerse por quienes no han conocido estas obras pertenecientes a una época irrepetible:
EL ESPÍRITU DE LA SELVA
La verdad es que resulta difícil hacerse a la idea de que ya han pasado más de cuatro décadas desde que en España apareció El Espíritu de la Selva por primera vez en los Quioscos. Aquellos tebeos, tenían una estética especial que seguramente nunca se olvidará, y naturalmente su contenido.

Evidente resulta, también, la semejanza con, sin duda, el más recordado de los héroes de Emilio Freixas para las páginas del semanario Chicos: El Capitán Misterio, al que se ha acusado de paladín del colonialismo al viejo estilo paternalista.

Sin embargo, en el Espíritu de la Selva, nos encontramos con la Leyenda Medieval del Preste Juan, de la que nuestro héroe sería descendiente directo.

El Preste Juan es un ejemplo de esa Europa Medieval, crédula y religiosa. Durante siglos, todos hablaban de él y nadie sabía si localizarlo en Asia, Africa o a caballo de uno y otro continente. Lo que se creía de este rey-sacerdote es que moraba en un lugar extenso y poblado de las Indias, que su poder era tal que había vencido al Islam, que poseía inmensas riquezas y además era cristiano. Fue una idea viva con la que soñaron misioneros, caballeros y navegantes.

El origen de la concepción de la existencia de un imperio cristiano en la India lo hemos de situar en el marco de una mitología popular. Las tierras conocidas no bastan a los hombres; siempre se proyectan los anhelos de fantasía y de aventura o las ilusiones de felicidad en territorios lejanos, misteriosos y poblados de prodigios. En casi todos estos lugares encontramos el rasgo común de la lejanía y la inaccesibilidad, al igual que el reino del Espíritu de la Selva.

Las mangas anchas de la historieta admiten muchos ingredientes y muy varios condimentos. El guión de El Espíritu de La selva, juega con la retórica y la ironía, para construir un relato de salpicado de humor.

Resulta mas que previsible augurar que, a juzgar por la tendencia entre buena parte de la critica de valorar las historietas en función de los contenidos temáticos del guión, un tebeo como El Espíritu de la Selva será vapuleado y acusado de colonialista, (aún y cuando se enfrenta al ejercito Ingles al que derrota) cuando en realidad, retomando las bases de una narración folletinesca y del cine de aventuras del período clásico de las grandes productoras americanas, los autores nos descubren una historia contada sin baches, con un interés in crescendo, salpicada de diálogos concisos, al servicio de la historia que se cuenta.

El dibujo habla por sí mismo, detiene la acción cuando eso es necesario, para acelerarla cuando el autor así lo considera. López Blanco llega a conseguir la sencillez a partir del conocimiento del medio, y eso no es tan fácil como parece, las peleas son todo lo entretenidas que cabe esperar y las tramas paralelas puntúan bien la acción. Además, encontramos a un autor preocupado por la planificación. Su reelectura nos lleva a una obra fresca que no aburre jamás.
A la hora de hablar del tebeo de posguerra, a la mente de todos acuden las precarias condiciones en la que tuvieron que desenvolverse aquellos esforzados dibujantes de historieta......, y es de esto último queremos hablar.

Nunca tuvieron tiempo suficiente, incluso en las mas de las veces no les permitieron hacer lo que deseaban. Llegaron a hacer 20 o 30 páginas a la semana ¿cuanta calidad conseguirían los dibujantes actuales dibujando todo eso?. No obstante pueden sentirse orgullosos de lo que hicieron.

López Blanco se convirtió por derecho propio en uno de los dibujantes más interesantes del panorama del tebeo español de los años 40/60, sólo superado en lo que a calidad se refiere por unos pocos. López Blanco mantuvo una regularidad que le ha permitió crearse un público fiel.

Sirvan estas líneas como sentido homenaje al recuerdo de uno de nuestros mejores historietistas de los años dorados de nuestros tebeos.
Escrito por Manuel López

miércoles, 22 de julio de 2009

Tecnicolor con movimiento















En la contraportada del almanaque de El Guerrero del Antifaz para 1958 aparecían una serie de dibujitos con los cuales al recortarlos se podía formar un librito que pasar las páginas con las imágenes daba sensación de movimiento.



Contraportada del almanaque con todas las imágenes.

Se me ocurrío que con estas imágenes podía crear un curioso gif animado sin necesidad de romper ni recortar el tebeo. He aquí el resultado:

Image Hosted by ImageShack.us

"Tecnicolor con movimiento"
Podemos encontrar otra reseña diferente de esta curiosidad en la página de mi amigo Mariano Bayona, la mejor página sobre el Guerrero que existe.
http://garaje.ya.com/guerrero55/recortab.htm

martes, 21 de julio de 2009

Los viejos rockeros nunca mueren

Parafraseamos a Miguel Ríos para rendir homenaje a dos publicaciones; Comicguía y El Boletín, sobre las que no encuentro la más mínima reseña ni información en los blogs que tratan sobre la actualidad del cómic. Yo por lo menos no he visto nada desde hace mucho tiempo (aparte del completísimo estudio de Tebeosfera sobre Comicguía).

Comicguía 72, primavera-verano 2009


El último número de Comicguía, el número 72, nos muestra una especie de analogía en la portada entre Hugo de Moncada, narración de Vicente Blasco Ibáñez y Adolfo de Moncada, El Guerrero del Antifaz. Casi la práctica totalidad del ejemplar está dedicada en esta ocasión al relato antes mencionado, además de otras secciones de la revista. Ya en una ocasión hicimos referencia a la citada publicación, la cual constituye una obligada referencia para encontrar cualquier dato o estudio sobre los autores y las obras del tebeo clásico español.

El Boletín 69. Abril- Junio 2009

El Boletín tiene tras de sí también una dilatada trayectoria ofreciendo esta colección un sinfín de estudios, articulos y otras aportaciones valiosísimas para el estudioso del tebeo clásico. Reivindica el valor del trabajo de muchos autores que si no fuera por estas publicaciones dormirían en el más absoluto de los olvidos.

El último ejemplar recibido, el 69, nos muestra un completísimo estudio sobre Ferrando y analiza uno a uno los ejemplares de la colección Platillos Volantes segunda parte, un trabajo de Roberto Hernández Callejones, colaborador de la revista.

Aquí pueden encontrarse números atrasados de la citada publicación.

Archivos El Boletín. Hazañas de la Juventud Audaz.


Además de dirigir la revista El Boletín, Carlos González edita mucho material relacionado con el tebeo de siempre; todo tipo de merchandising, números especiales y la colección Los Archivos de El Boletín, cuyo último ejemplar reedita Hazañas de la juventud Audaz, la obra más emblemática de Matías Alonso, con un documentado e interesantísimo estudio a cargo de Agustín Riera. Muy recomendable.

Tan sólo me queda dar la enhorabuena tanto a Francisco Tadeo como a Carlos González por su trabajo, desearles que sigan contra viento y marea en su empeño y que podamos disfrutar de la presencia de sus publicaciones durante muchos años más.

lunes, 20 de julio de 2009

YUKI EL TEMERARIO


















¿Qué es la vida?
Es el destello de una luciérnaga en la noche.
Es el resuello de un bisonte en invierno.
Es la diminuta sombra que corre por la hierba
y desaparece cuando se pone el sol".
Pie de cuervo, jefe pies negros
(1821-1890)

Estudio elaborado por Manuel López.

En 1492, cuando Cristóbal Colón puso pie sobre el Nuevo Continente, se hallaba convencido de haber llegado a la India. Por ello dio a los indígenas de América el nombre de indios. Más tarde los blancos los llamaron "pieles rojas", pero en realidad el piel roja no tuvo jamás la piel roja, sino que se untaba todo el cuerpo con el jugo de una planta que aún en nuestros días se llama en América del Sur el "rucu". Esta planta de notables propiedades produce un jugo del más bello color rojo. Como vivía medio desnudo en la naturaleza el indio necesitaba proteger su piel contra los ataques de todo tipo, entre los cuales no era despreciable el de los mosquitos. Las repetidas aplicaciones del rucu, mezclado con grasa animal, consiguen en parte cerrar los poros, impidiendo a ciertos parásitos poner sus huevas bajo la piel. El rucu evitaba a los pieles rojas algunas de las fiebres que padecían los blancos.
Esta denominación designa aun hoy a los nativos de Norteamérica.


Yuki, el temerario
Ficha Técnica.
Yuki el Temerario.
Editorial: Valenciana 112 cuadernos 17x24 + 3 extras
Año de edición del primer número: 1958
Dibujantes: José González Igual (1-20; 31-42; 63-112)
Vicente Ibañez Sánchis (21-30; 43-62)
Guionista: F. Amorós


Aunque en los cuadernos de Yuki se nos dice que su tribu, los Chiricauas, forman parte de la gran nación de los Siux, lo cierto es que los Chiricauas eran apaches y su último Jefe fue Gerónimo fallecido el 17 de Febrero de 1909.

Un poco de historia (1)
Los apaches guerrearon contra los españoles 300 años y después 50 contra mexicanos y estadounidenses. Hoy los descendientes de Gerónimo viven en Oklahoma.

¡Son una leyenda viva!, lo que no es extraño, porque todo empezó también con otra leyenda: la de las siete ciudades de Cíbola.
La leyenda dice que cuando los árabes invadieron la península, siete obispos españoles huyeron a América: 500 años antes que Colón. Allí fundan las siete ciudades de Cíbola. Los conquistadores identificaron los relatos sobre los indios Pueblo con esas ciudades fabulosas junto a minas de oro…. ¡La fiebre del oro!
Se suponía que Cíbola podía estar en Nuevo México y buscándola, Vázquez de Coronado se encuentra en 1540 con los apaches de las llanuras. Les llaman "apachu" porque los zuñi les llamaban "apachi" (enemigos).
Las cargas de caballería y arcabuzazos de los conquistadores someten a los indios pueblo, pero no encuentran oro por ninguna parte, aunque sí maíz… Y tomaron posición, para la corona de España, de ¡el Gran Cañón del Colorado!.
En 1650, los apaches ya han aprendido a domar y montar los caballos de España y, aunque los pueblo ya se han sometido, las siete tribus apaches perseveran en su rebeldía. Chiricauas, navajos, mescaleros… Mientras, los franciscanos han conseguido que los pueblos identifiquen los sacramentos del matrimonio, bautizo y funerales con sus ceremonias ancestrales. Un éxito… ¡Pero no tienen equivalente católico para la danza de la lluvia!.
Tras la sangrienta rebelión de los pueblo y la represión de Diego Vargas en 1692, los conquistadores llegan a la astuta conclusión en 1786 que es más rentable alimentar a los indios que guerrear contra ellos. Les entregan cada año raciones, mantas y ropa. Además, tras el viaje del marqués de Rubí I Sant Climent, se alían con los comanches contra los apaches. Y así pacifican la frontera hasta la independencia de México.

Pero los apaches siguen sin someterse. La independencia de México trae el caos económico y la suspensión del subsidio a los indios. Los apaches se rebelan y arrasan el país.

Y llega la caballería.
A mediados de siglo, los anglos avanzan por Arizona, Nuevo México y California e inician su propia colonización y heredan "el problema" apache.
Para empezar, el gran jefe Cochise propina una dura lección de guerra moderna a la inexperta caballería de Estados Unidos.
Cochise colgaba a sus prisioneros vivos boca abajo en un árbol sobre una hoguera durante días de interminable tueste. El dolor para ellos tenía un significado muy diferente del que se tiene hoy para nosotros. Hay que conocer los valores apaches para comprender el fundamento moral y el alcance ético de sus acciones de combate.
Por otra parte, conviene no olvidar que la caballería estadounidense torturó con bayonetas al rojo vivo al jefe Mangas Coloradas durante jornadas que suponemos que para él también fueron interminables…
Con Cochise, la caballería estadounidense lo pasó mal. Los Chiricauas eran auténticos señores de la guerra. Su táctica de brigada ligera con incursiones a caballo y retorno al refugio inexpugnable y siempre móvil les hizo invencibles ante un ejército estadounidense mediocre y desmotivado. No obstante los americanos aprendieron pronto una táctica en la que los españoles habían sido maestros: los "scouts"", como los cipayos o los jenízaros.

Reclutaban apaches como exploradores al servicio del Ejército. Ellos fueron una eficaz inteligencia militar y los únicos capaces de rastrear a los guerreros apaches hasta sus refugios. Cochise al final acabó firmando un tratado que no era nada malo, incluso era bueno, pero duró poco… Entonces, ante las nuevas humillaciones, su hijo, Naiche se rebeló contra el gobierno… La suya fue la última rebelión apache. Naiche levanta una partida de rebeldes animados por el indomable Gerónimo. Al final un grupo de apenas 40 guerreros logra burlar durante meses la persecución de 3000 soldados y varias compañías de "scouts".
Los apaches son de la familia de los navajos. A la llegada de los blancos, y tras haber aprendido a domesticar el caballo, la tribu de los Chiricauas se separó de sus hermanos, los navajos, y se convirtió en vagabunda, adoptando el modo de vida apropiado a esta nueva situación.
El campamento apache es de un descuido abrumador. Hombres y mujeres aparecen mugrientos y vestidos con andrajos; no se lavan, y reconocen de buen grado que deben algunas de sus
victorias a su aspecto feroz y repugnante. Esta suciedad no excluye su gran valor en el combate y su destreza ecuestre.
El apache debe estar siempre dispuesto a huir y por eso su vivienda no pasa de ser un amontonamiento de ramas que, aunque permeable al agua, constituye un camuflaje ideal en caso de ataque por sorpresa.

(1) Resumen extraído de la entrevista efectuada a Edward K. Flagler en La Vanguardia del 23.03.2002



Yuki, el temerario
Después de la lectura de los dos apartados precedentes, es fácil comprobar que los Chiricauas de los cuadernillos de Yuki, el temerario, nada tiene que ver con la realidad histórica de los apaches, licencias de los tebeos.
Yo empecé a comprarme este tebeo atraído por sus espectaculares portadas. El guión, acompañado de unos excelentes dibujos, era también sumamente atractivo. Yuki, nuestro héroe se veía acosado por un militar empeñado en acabar con él a toda costa. Lo que no podíamos imaginar, era que en realidad eran Hermanos.
Tebeo en el que, rompiendo el tópico de colecciones anteriores, se trata a los indios de manera diferente. Las guerras contra el invasor blanco parecen haber llegado a su fin. Sin embargo la conducta de las tropas estadounidenses hace cambiar de opinión a Yuki, un hombre hasta entonces pacífico y partidario de pactar con los blancos. Ahora, convencido de que la fuerza es el único modo de defender sus derechos y los de su tribu, se lanza a la guerra, desencadenando a su paso el pánico y la destrucción, iniciando de nuevo una campaña bélica en la que se suceden los más feroces enfrentamientos.
Yuki, el temerario, como muestra del género es ejemplar: Oro-codicia, egoísmo - deseo, dignidad, amor, pero también sobre la ambición y su poder corruptor, sobre la sociedad, sobre la discriminación y la integración, sobre la amistad, la tentación, la traición y la vergüenza. Cuestiones universales de ética sobre las que no se discursea, sino que están encarnadas en la peripecia dramática que viven unos personajes en una historia que se nos cuenta ciñéndose a lo esencial, con orden y serenidad, con exaltación, con tensión y ternura, con delicadeza y violencia.
Yuki, el temerario es, uno de los últimos coletazos de cierta forma de entender la historieta, una perfecta ilustración de las virtudes del tebeo clásico autóctono en su momento máximo de esplendor y de madurez, poco antes de emprender el descenso, Yuki el Temerario es un excelente tebeo

José González (Valencia 1938-1985) y Yuki el Temerario
Por lo general, los tebeos de los autores del tebeo valenciano comparten entre sí características comunes, que las hacen reflejo de la capacidad creativa y de la forma de expresión de un estilo determinado. En el caso de José González, estas características comunes son la importancia de la figura en movimiento que priva sobre los paisajes naturales o de los escenarios urbanos. En el di-
bujo de este autor se aprecian distintas influencias ajenas, es un dibujo deudor de los clásicos estadounidenses como Foster, Raymond, etc. No obstante, le confiere un estilo muy personal.

Vicente Ibañez (Valencia 1938) y Yuki, el Temerario
Si bien su mejor trabajo en el tebeo autóctono fue El Sargento Virus (1962), destaca en Yuki su excelente montaje en la continuidad de las viñetas además del elegante dibujo.

Federico Amorós (Valencia) y Yuki el Temerario
No es Yuki, El Temerario, en sentido estricto, mi favorito, pero sí, sin la menor duda, uno de los que prefiero; además, me parece uno de los mejores trabajos de un guionista que cada día aprecio más. Desde la primera vez que le leí, hace ya muchos años ya, hasta hoy, siempre me ha producido el mismo entusiasmo, la misma emoción, idéntico placer e idéntica admiración.

A modo de conclusión
Lo expuesto hasta aquí puede dar una idea de la altura que alcanza esta obra. Estamos ante un trabajo en el que lo fundamental es el desarrollo perfecto de una narración en forma de historieta.


Los fotogramas de la memoria:
"Yuki, el temerario" y Las guerras indias

El tebeo va cambiando a medida que va cambiando la sociedad. Ahora no cumple la función que cumplía en nuestra infancia o adolescencia.
Los aspectos profesionales del medio en aquellos años nos ofrecen una imagen bastante sombría, los muchos y buenos profesionales españoles chocó con la ineficacia y cicatera política de los editores, lo que les llevó fuera de nuestro país, lo que ayudó a una paulatina caída del mercado ahogando con ello el crecimiento de nuestra historieta. Así el mundo de la historieta, tal como la conocimos, ha desaparecido hace ya muchos años.
Y como dice Antonio Martín, que nadie pregunte qué se ha hecho de los cientos de profesionales españoles de la historieta que existían y trabajaban en décadas anteriores... Su sentencia se firmó el día en que las empresas españolas se dedicaron a comprar baratos y en cantidad los derechos editoriales de los cómics de otros países...

LOS AÑOS DIFICILES
A finales de los años cincuenta se hizo evidente que la historieta ya no se vendía como en sus mejores tiempos, a pesar de que la oferta, a mi juicio no dejaba de ser interesante.
Los héroes del tebeo nacen, se hacen y desaparecen. Los menos consiguen dejar huella en la historia de la historieta. Los personajes de los tebeos son así. Algunos serán recordados de o-
tros nadie se acuerda. Lo cierto es que a finales de la década de los 50, en 1958 a lo largo de 112 cuadernos y 3 tres números extraordinarios, con guión de F. Amoros y dibujos de J. González y Vicente Ibañez, apareció en los Kioscos el personaje que hoy recordamos: Yuki, el temerario.

YUKI EL TEMERARIO
La historia de un jefe piel roja que Luchó por su honor y por el de su tribu
LOS CHIRICAUAS
Defendiendo sus derechos y tradiciones


Es desde la perspectiva estética de sus portadas, lo que me llamó primeramente la atención hacía Yuki, el temerario. Serie que no alcanza el tono mítico de "El Pequeño Luchador" - tampoco lo pretendía - , pero no es una a obra menor sino muy al contrario, es una excelente historieta, que no resulta en ningún momento aburrida, que sin ser una obra maestra, es un tebeo altamente recomendable.
La acción transcurre sobre 1870/1876, durante las guerras indias. Yuki el temerario es un tebeo en el que la épica, (donde nos deleitan con espléndidas secuencias de luchas y persecuciones), prevalece en principio sobre los sentimientos y el estudio de las personalidades, si bien no falta la intriga romántica, representada por el Capitán Kid Lane y su prometida Diana, y Agua Plateada, india enamorada de Yuki. Y, por supuesto está llena de una galería de
personajes secundarios, tan común en las series centenarias de la época.
En los tebeos de Yuki dibujados por José González, se puede observar su evolución formal número a número y en los que encontraremos cuadernos excelentes, en cuanto a dibujo, y otros de corte más irregular, aún así, unas más que interesantes historias de lectura muy recomendable. Son unos tebeos próximos a nosotros pero con peculiaridades diferenciadoras del tebeo actual. El dibujo de J. González, es deudor de los clásicos norteamericanos, no sólo del dibujo, incluso de un sin fin de viñetas, si bien, y eso es innegable, confiriéndole su propio estilo.
Para el lector actual, Vicente Ibañez es un completo desconocido. Sin embargo, es uno de los mejores historietistas que ha dado la historieta autóctona, con un dibujo elegante y un sentido del montaje y lo narrativo excepcional.
No es mi intención hacer aquí un estudio sobre el malogrado José González ni Vicente Ibañez, remito al lector a los diferentes estudios que sobre los mismos han hecho otras plumas más cualificadas que la mía.
Las guerras indias

Entre 1869 y 1890 se llevaron a cabo las denominadas "guerras indias". Por aquellos años, es posible señalar -en términos generales- dos grandes grupos de indígenas propensos a defender violentamente la supervivencia de su cultura: en las llanuras del norte, los sioux, comandados por Toro Sentado y Crazy Horse; en los desiertos del sur, los apaches, con sus jefes Jerónimo y Cochese. Estos últimos también hostigaban a las haciendas del norte de México.
Hasta 1868, los conflictos con los indígenas de la llanura fueron solucionados mediante tratados provisorios. Pero en dicho año se firmó en Fort Laramie el último de dichos convenios con los sioux, pues a medida que el avance de los colonos se hacía cada vez constante, el choque violento se hizo inexorable. El gobierno de los Estados Unidos adoptó, entonces, oficialmente una política de sujeción violenta de la cultura aborigen de las llanuras, que no se detuvo ante la posibilidad misma de su exterminio físico.

Entre 1869 y 1876 se libraron más de 200 combates.

En 1876, el poderío indio llegó a su apogeo: en la batalla de Little Big Horn, el jefe sioux Crazy Horse destrozó a las divisiones del general Custer (un ex veterano de la Guerra Civil), en un encuentro que en los libros de historia norteamericana se recuerda como La Masacre.

Pero el éxito sería efímero. Los apaches de Jerónimo fueron finalmente derrotados en 1886. Los sioux, por su parte, dieron su última batalla en 1890, en un trágico episodio que generó una última masacre de indígenas. El hecho se desató cuando el gobierno federal prohibió a Toro Sentado y a los escasos sobrevivientes de su tribu, (por entonces encerrados en una reserva aborigen) la realización de los rituales de la Danza del Sol. La prohibición estatal obedecía a que, amén de la tradicional adoración del bisonte, la Danza del Sol había adquirido un carácter milenarista y de cerrado rechazo hacia la cultura occidental. Cuando el anciano líder sioux desoyó la advertencia de los agentes federales, las tropas del ejército irrumpieron en la reserva. Los indios intentaron escapar y, al ser alcanzados, se libró el último gran combate de las guerras indias: la batalla de Wounded Knee, en la que perdió la vida Toro Sentado.

El hombre blanco acabaría irremediablemente destruyendo un complejo cultural que se remontaba hasta 10.000 años antes de Cristo, cuando los primeros paleoindios cazaban mamuts y bisontes, en los tramos finales de las glaciaciones.

A modo de conclusión
Lamentablemente a causa de la poca importancia de ciertas manifestaciones del arte, tenemos cientos de tebeos que van directos al olvido. Miríadas de historietas, colecciones enteras son así condenados a la nada, luego de haber cumplido con su función de entretener por algún tiempo a un eventual lector en busca de un pasatiempo. Aquellos tebeos que nos proporcionaban la sensación de aventura….

Yuki, el temerario conserva todos los ingredientes que nos hacían soñar con aventuras. Una lectura, en resumen, francamente recomendable y que puede servir como rápida introducción para la obra de un guionista verdaderamente valioso, de los que demuestran que la calidad en el estilo y el buen trato del argumento están lejos de suponer dificultad en la lectura o monotonía en la narración. Si la acción se desarrolla por cauces relativamente previsibles, no por ello pierde el pulso. Los personajes están perfilados con tino. Con estas premisas es comprensible que el lector quede atrapado en la red tejida por F. Amoros.
L. Porras

-Los indios tienen un modo muy curioso de atacar a los “rostros pálidos”: Su táctica consiste siempre en un ataque frontal donde son blanco fácil para los rifles de sus enemigos y, una vez han llegado al objetivo, se dedican a dar vueltas y vueltas alrededor de sus pobres víctimas.
-Los caballos nunca se escapan, aunque el vaquero de turno tan solo apoye las riendas sobre un palo.


Galería de portadas originales (cortesía de Mario Mártinez Montesinos):

Galería de portadas de la reedición vertical de los años setenta:

viernes, 17 de julio de 2009

El Guerrero por Marisa Gago Quesada


En Voto a Bríos tambien nos apuntamos a la sección "El Guerrero visto por..." en este caso Marisa Gago Quesada (hija de Manuel Gago), con un dibujo extraído de la página de facebook de su hermana Teresa. Ella misma comenta: - ¡Como ha degenerado el Guerrero!. Que no se enfaden sus fans. Mi hermana y yo lo podemos degenerar con permiso del autor...el dibujo es tosco, ya lo sé, pero no somos profesionales.

jueves, 16 de julio de 2009

domingo, 12 de julio de 2009

Entrevista a Alfons Figueras


Mucho se ha escrito estos días sobre Alfons Figueras con motivo de su desaparición. Hoy voy a poner un enlace a una entrevista realizada por Manuel Darías a este autor en 1977. Por haberse publicado en un Diario netamente local y no ser un lugar ni mucho menos frecuentado por el lector habitual de blogs dedicado a los cómics, he considerado oportuno ofrecerlo.



Y ya de paso, recomendar la visita todos los domingos a este diario. En uno de los apartados de la sección CULTURA suele encontrarse el artículo semanal de Manuel Darías.

sábado, 11 de julio de 2009

LA ESTANTERIA DE MI CASA. EL BLOG DE SEBAS.


El Guerrero del Antifaz por Sebas

Acabo de descubrir otro fantástico blog: La estantería de mi casa, sitio dedicado al tebeo de siempre donde se pueden observar algunos originales dedicados por Arturo Rojas de la Cámara, Sanchis, Bernet, Marcet, Ibañez, etc y algún que otro dibujo o historieta realizado por el mismo Sebas, autor del blog, quien nos promete ir "colgando" poco a poco su colección de originales que, por lo que cuenta, tiene que ser digna de admiración.


El Guerrero del Antifaz por Marcet.

Hemos "cogido prestadas" las dos imágenes que ilustran esta entrada del blog mencionado. Espero que no le importe a Sebas.

A partir de este momento "La estanteria de mi casa" pasa a la columna de la derecha de este blog para mantenernos informados de sus actualizaciones.

viernes, 10 de julio de 2009

Exposición de Bernal y Revilla


El Jabato por Antonio Bernal


El Jabato por José Revilla

Me acabo de enterar, gracias al foro del Capitán Trueno de una exposición de originales de Bernal y de Revilla que tuvo lugar en el Salón del Cómic La Massana 2009. Pinchando el siguiente enlace podemos accder a un buen repaso fotográfico del evento.


miércoles, 8 de julio de 2009

El doctor cataclismo


¡Voto a bríos! Esta mañana me encuentro con la sorpresa de que el doctor Cataclismo menciona mi blog.¡Muchas gracias!
Visiten el blog y les aseguro más de una carcajada.
http://drcataclismo.blogspot.com/